Hoy vi a tres o cuatro personas en muletas o con un pie cojo, en menos de veinte minutos, en el trayecto del sitio donde doy mis clases hasta mi oficina. A veces veo también, por ejemplo, a tres o cuatro personas con quienes practico yoga a diario, en ocho minutos, en el trayecto de mi oficina al sitio de almuerzo. O a tres o cuatro embarazadas en el metro, en un mismo vagón ( y no a todas les ceden el asiento).
Anuncios